Si bien a todas las personas en este mundo (o bueno, al menos a la mayoría de ellas), nos gusta vivir en un hogar perfectamente limpio y organizado, hacer las labores propias de la casa como barrer y trapear los pisos, lavar los baños, sacudir el polvo, organizar todas las cosas, no siempre es una tarea muy agradable y por tal motivo, es muy fácil perder por completo la motivación cuando debemos enfrentarnos a los quehaceres hogareños.
Entre las principales razones que existen y que desmotivan grandemente a las personas al momento de hacer las tareas del hogar, se encuentran las siguientes:
1. La fatiga del día a día
Es completamente comprensible, sobre todo si usted tiene un trabajo estresante y niños pequeños que cuidar. Luego de un arduo día de trabajo, hacer aseo en el hogar no es precisamente lo que la mayoría de personas espere tener que llegar a realizar.
2. Parece un proyecto enorme
Cuando la casa está muy desordenada, parece como si la limpieza tomara una eternidad para poder ser llevada a cabo. Lo cierto de esta idea tan común que ronda en la mente de las personas, es que en solo un par de horas, la mayoría de tareas del hogar estarán completamente terminadas siempre y cuando haya alguien que se proponga llevarlas a cabo.
3. No quiero limpiar para los demás
En muchas ocasiones ocurre que, en aquellos hogares donde vive más de una persona, siempre hay alguien que desea organizarlo todo, mientras que los demás solamente se dedican a desordenar y a ensuciar. Cuando esto sucede, quien siempre limpia, fácilmente se desmotiva al ver que los demás nunca suelen colaborar en esta clase de actividades.
4. Acabo de limpiar
Limpiar y hacer aseo no siempre es una labor agradecida. Apenas el día de ayer se hizo un aseo general del hogar, y ya hoy todo está completamente sucio y desorganizado nuevamente, y hay que aceptarlo, nadie quiere empezar a limpiar todo de nuevo cuando apenas hace un par de horas ha terminado de organizar su casa.
5. Múltiples ocupaciones
Si usted es una persona que trabaja arduamente, que además debe cuidar de sus hijos y que a decir verdad no tiene tiempo mucho extra disponible, entonces encontrar el espacio justo para dedicarse a organizarlo todo no es una tarea muy fácil de lograr.
Quien tiene múltiples ocupaciones, anhela deshacerse de algunas de ellas, en lugar de agregar más cosas a su lista de “pendientes por hacer”.
6. Es abrumador
Cuando el desorden se ha acumulado durante mucho tiempo, es bastante abrumador decidirse a comenzar a ordenar. A veces el aseo del hogar puede convertirse en una pesada carga, sobre todo en aquellas casas demasiado grandes donde hay muchas cosas para limpiar y organizar.
Pero a pesar de todo lo anterior, limpiar nuestro hogar es algo que siempre debemos hacer. Para lograrlo sin fracasar en el intento, a continuación encontrará 9 consejos eficaces para motivarse a limpiar su hogar, incluso cuando no siente el más mínimo deseo de hacerlo.
1. Limpie por usted y para usted
En cada familia siempre existirá alguna persona amante del desorden y la suciedad y eso es algo contra lo que es una completa pérdida de tiempo intentar luchar. Si usted es la persona ordenada y organizada de su familia, probablemente se sienta un poco resentido por la cantidad de limpieza que hace en comparación con aquellos miembros de su hogar a los que nunca les gusta colaborar con esta clase de actividades.
Frente a esta situación, lo mejor que puede hacerse es pensar en la limpieza como una tarea que usted hace para mantener su propio entorno como algo cómodo y agradable. No importa si las demás personas de la casa no desean colaborar. El aseo del hogar es como el aseo personal, se hace para sentirse bien consigo mismo, sin importar lo que las demás personas puedan pensar al respecto.
Así que, la próxima vez que piense en hacer aseo en su hogar, ponga manos a la obra y haga lo mejor que pueda para mantener ese espacio en el que usted vive lo más limpio que le sea posible. Si las demás personas en su hogar no colaboran, no importa. Hágalo por usted y para usted y nunca para los demás.
2.. Comience con poco
Si está abrumado por el desorden y no sabe por dónde empezar, sólo tiene que encontrar algo por donde comenzar. Muchas personas acostumbran a elegir una categoría de cosas por las cuales comenzar a limpiar y recoger. Por ejemplo, la basura en general, los juguetes cuando hay niños pequeños en casa, el desorden de la cocina, la ropa regada por todas partes, etc. Una vez se elija cualquier categoría, simplemente hay que comenzar a recoger y a ordenar aquello por donde se ha decidido empezar.
Terminado este pequeño logro, se puede comenzar a ordenar algo más de todo aquello que esté pendiente de ser ordenado, limpiado y puesto en su lugar, y no es necesario hacerlo todo en un mismo día.
Otra táctica que suele funcionar, es comenzar a limpiar y a ordenar por un espacio pequeño, como por ejemplo, el mesón de la cocina. Una vez todo en el mesón de la cocina esté completamente limpio, podrá moverse hacia cualquier otro lugar de la casa que necesite de una buena mano de aseo y limpieza.
3. Comience temprano
Quien comienza a hacer todo temprano, de igual forma termina de hacer todo temprano. Tal y como lo escribió Mark Twain, "Si es tu trabajo comerte una rana, es mejor hacerlo a primera hora de la mañana, y si tu trabajo es comer dos ranas, lo mejor es comer la más grande primero", lo que significa que, si usted consigue comenzar a primera hora del día por aquellas cosas que más trabajo le cuestan, finalmente tendrá un resto de día mucho más productivo y feliz.
Por lo tanto, quitar la basura y ordenar el hogar temprano, significa que tendrá el resto del día para hacer otras cosas mientras disfruta de tener su hogar como siempre lo ha querido ver.
4. Cree una rutina de limpieza y un horario
Cree una rutina de limpieza que funcione para usted y que lo mantenga motivado. Reservar un día entero para la limpieza puede funcionar para algunas personas, pero no para todas. En muchos casos, dedicar pequeños espacios de tiempo para limpiar, son la mejor manera de mantener todo en perfecto orden.
Por ejemplo, dedique solamente 25 minutos constantes para la limpieza de una parte de su hogar cada día. Esta forma de limpiar funciona muy bien en todos los hogares, ya que ayuda a que siempre haya algo de limpieza en el hogar y permite tener más libertad para cuidar de los hijos pequeños, en el caso de aquellas madres que deben estar en casa a cargo de los más pequeños.
Si la energía se lo permite, aumente a dos periodos de 25 minutos de limpieza por día en su hogar. Se sorprenderá de todo lo que puede limpiar de esa forma cuando se compromete a trabajar durante esos 25 minutos sin distraerse en ninguna otra actividad.
Cuando se trabaja el aseo del hogar en pequeños periodos de tiempo cada día, se puede hacer todas las demás labores sin ninguna interrupción. De igual forma, el hacer el aseo del hogar por pequeños periodos de tiempo durante el día, ayuda a mantener en alto la motivación.
Si usted es una persona muy organizada, entonces asigne tipos de tareas a realizar, dependiendo de su disponibilidad de tiempo cada día de la semana. Imprima una lista de verificación de limpieza para saber qué tareas de limpieza debe realizar cada día. Esta lista puede ir desglosada según los diferentes espacios de su hogar. De esa manera el trabajo de limpieza será aún mucho más sencillo de llevar a cabo.
5. Haga del aseo un juego
Si encuentra que el uso de un cronómetro para organizar los periodos de limpieza de cada día es útil para usted, entonces considere la posibilidad de convertir esto en un juego en el que pueda incluir sobre todo a los miembros más pequeños de la familia.
Fije su cronómetro para un período corto de tiempo (10 minutos es una buena cantidad) y dígales a los niños que recojan la mayor cantidad de juguetes o cualquier otro utensilio que este desordenado, o que ayuden a limpiar la cocina durante ese corto espacio de tiempo.
Si los niños colaboran en esta actividad durante toda la semana, el fin de semana pueden recibir a cambio una pequeña recompensa como lo es el ir a un cine o salir a comer un helado.
6. Organícese hasta para hacer aseo
Hasta para hacer aseo se necesita ser una persona organizada. No hay nada peor que tener que andar por la casa tratando de encontrar los suministros de limpieza que necesita. En su lugar, dedique un espacio en su casa para tener todos los elementos de aseo (jabones, cepillos, desinfectantes, etc.) siempre listos y a la mano. Esto tan sencillo como suena, hace que hacer el aseo del hogar sea aún mucho menos desmotivante de lo que para muchas personas suele ser.
7. Escuche música o cualquier otra cosa que sea de su agrado
Escuchar música o cualquier otra cosa que a uno le agrade mientras hace las labores de aseo, convierte la labor del aseo en algo completamente diferente. La música por ejemplo, tiene la capacidad de alterar el estado de ánimo de las personas, luego si usted escucha la música que más le agrada mientras se dedica a limpiar y a organizar su hogar, cuando menos se dé cuenta tendrá todo completamente listo y terminado, y el tiempo habrá pasado de largo sin que usted siquiera haya podido notarlo.
8. Haga del aseo un evento familiar
A no ser que usted viva completamente solo o sola, la limpieza en nuestra casa es una responsabilidad familiar. Es mucho más fácil hacer el aseo de un hogar cuando todas las personas que viven allí participan, que cuando toda la tarea se le deja a uno solo de los miembros.
Concientizar a todos los miembros de la familia de que el buen aseo en el hogar es una situación en la que todos ganan, no es a veces una tarea muy difícil de llevar a cabo.
Si usted es la única persona que gusta de hacer aseo en su casa, siéntese a negociar con las demás personas que viven con usted, y pídales que al menos se encarguen de mantener limpio y ordenado el espacio en el que más tiempo permanecen. Algunas de esas personas se negarán rotundamente a colaborar, pero existe la esperanza de que algunas otras personas se decidan a colaborar y a esas personas es a quien hay que intentar convencer por todos los medios posibles para que el aseo en el hogar sea una tarea mucho más fácil y llevadera para llevar a cabo.
9. Si en realidad no se siente capaz
Entonces considere la posibilidad de pagarle a alguien para que al menos una vez por semana haga un buen aseo general en su hogar. En todas partes del mundo hay personas que viven de hacer aseo en el hogar de otras personas, a cambio de una suma de dinero, y muchos de estos trabajadores se han especializado enormemente en esta labor, lo que les permite hacer un buen aseo de calidad en tan solo un día, aunque bueno, esto último depende solamente de qué tan desordenado y sucio pueda estar su hogar.
Si bien esta opción le costará algo de dinero, pues si usted puede permitirse pagar por ello, entonces hágalo. De esa manera le estará dando empleo a alguien que lo necesita y que estará dispuesto a hacer algo que a usted simplemente no le gusta hacer.
Usted se beneficiará al tener su hogar completamente limpio, y la persona que haga el aseo por usted habrá ganado dinero para sostenerse un día más. Es una situación de ganar y ganar para ambas partes.
Es muy fácil desanimarse cuando hay que limpiar la casa y no existe el deseo suficiente para hacerlo. Sin embargo, cuando se logra hacer las cosas correctamente y se encuentra la mejor forma de hacer todo de una manera rápida y efectiva, entonces es mucho más fácil encontrar la motivación necesaria para comenzar a limpiar y a ordenar.
Piense en lo mucho menos estresado que estará cuando vea todo limpio y en su lugar y entonces se dará cuenta que hacer aseo y limpiar la casa es una actividad que en verdad vale la pena y que en realidad toma mucho menos tiempo del que usted puede llegar a imaginar.
Además de que tener un hogar aseado y limpio es sinónimo de un hogar saludable, un hogar en donde todo está completamente limpio y aseado, muestra mucho de lo que son las personas que lo habitan. El hogar es en muchos sentidos el reflejo de la clase de personas que allí viven, así que, teniendo esto en cuenta, sería buena idea que comenzara a organizar su hogar hoy mismo. Un hogar limpio y ordenado, es un hogar en donde da gusto estar y a donde da gusto llegar.
Su hogar es su castillo y usted es el rey que vive allí, entonces, sin importar si usted tiene o no dinero, lujos y comodidades, esfuércese por hacer de su propio hogar, el mejor lugar que usted tiene para vivir.
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